Mi Escuela Dulce

El sol salió por el este y empezó a repartir su calorcito por todo el pueblo.

Luis esperó, como todos los días que iba a la escuela, el colectivo en la esquina de su casa. Pero algo debió de haber pasado, porque no había caso: no venía y no venía. Entonces pasó la primera cosa rara de esos días salió su mejor amigo Miguel  Ángel quien desde su nacimiento  presentó cataratas congénitas, posteriormente le habían realizado una cirugía la cual no fue muy exitosa porque a los días le dio una hemorragia la cual fue muy mala para él, desde allí Miguel Ángel fue perdiendo la vista progresivamente  hasta ser total, aunque en ocasiones él dice que tiene destellos de luz.

Miguel Ángel  me preguntó que para donde me dirigía, y le conteste: para mi escuela. - Qué  hacen ahí? me preguntó, le contesté que jugamos, reímos, cantamos y sobre todo aprendemos muchas cosas para nuestro futuro, si quieres me acompañas y te presento a mi profe Nataly ella es muy tierna con nosotros y nos quiere mucho, nos dirigimos a la escuela. Desde ese entonces empecé a observar detenidamente todo  lo que realizaba Miguel Ángel.

Desde lejos Miguel Ángel sentía el olor a deliciosos dulces y me preguntó -¿qué es ese olor tan agradable?, le dije: - ya estamos llegando a la escuela, ella es de dulce,  se me olvidaba contártelo; Miguel Ángel se apresuró un poco más porque estaba curioso en estar en la escuela.

Cuando entramos la profe nos dio un fuerte abrazo y nos dijo: - Buenos días mi dulces de chocolate. ¿Cómo amanecieron hoy?.  Miguel estaba un poco tímido, la profe se acercó y le preguntó: -¿qué te sucede?, ven,  vamos a jugar con tus nuevos amigos  y él contestó:  -es que yo no puedo ver, yo soy ciego, (en tono de tristeza); la profe le dijo: - “Tal vez no puedas ver, pero aquí vas aprender a utilizar tus sentidos de otra manera y a realizar otras cosas muy difíciles que te van ayudar  a ser una persona estupenda, y ahí sucedió otra cosa rara empezamos todos a jugar y aprender cosa nuevas.

Cuando regresamos a casa,  la mamá de Miguel Ángel estaba muy angustiada buscándolo por todo el barrio, al verlo  dijo: - “pensé que te habías perdido, no lo vuelvas hacer”. Miguel  Ángel con un fuerte abrazo y beso le prometió no volverlo  hacer.

La señora Carmenza (mamá de Miguel Ángel) bueno ahora me vas a contar que tanto hiciste en la escuela de Luis.

-Mami esa escuela es muy chévere hay muchos niños,  todos me quieren y  respetan mi condición visual, antes me ayudan, están muy pendientes de mí,  la profe Nataly es estupenda, quiero volver allá mañana y todos los días del año.

Así fue que doña Carmen al día siguiente lo llevó y habló con la profesora. Desde ese momento al profesora empezó a trabajar muy fuerte con Migue Ángel.

Los días miércoles, jueves y viernes realizaban algunos ejercicios especiales para fortalecer o desarrollar en él la  motricidad fina: rasgado, manejo de plastilina, ensartado, abrochar, hasta con el punzón le enseño a utilizar, etc.;  para la motricidad gruesa: equilibrio, el salto, la lateralidad, el espacio, la movilidad por la escuela  y le fue enseñando el sistema braille con los seis puntos básicos, en ocasiones él no quería utilizarlo como si le tuviera miedo, pero la profe con sus dulce forma de enseñar le ayudó y problema solucionado.

Un día hablando con Miguel Ángel  dijo esta bellas palabras: - “esta experiencia es un cambio de vida, pero me he dado cuenta que existen nuevas formas para realizar nuestros sueños, tal vez los tiempos aumentan, las oportunidades son menores, pero con perseverancia y decisión se pueden lograr todo lo que nos propongamos”. 

“NO DIGAS NO PUEDO NI EN BROMA, PORQUE EL  INCONSCIENTE NO TIENE SENTIDO DEL HUMOR, LO TOMARÁ EN SERIO, Y TE  LO RECORDARÁ CADA VEZ QUE LO INTESTES” Facundo Cabral.

NATALY MADERO PAMA